Chiscas es una expresión muisca que nombra a elementos del paisaje natural como ciénagas; por eso al territorio se le conoce como lugar cenagoso. A la llegada de los españoles en 1541, el caserío estuvo habitado por los indígenas Laches y Chiscas, quienes opusieron una fuerte resistencia a la invasión de su territorio. En 1777 se creó la parroquia de San Antonio de Chiscas, y en 1811 se elevó a municipalidad. El territorio de Chiscas cuenta con varios pisos térmicos que van desde los 1800 msnm hasta los 4600. Gracias a esa variedad climática y a las condiciones físicas del terreno, es fácil encontrar cultivos que van desde la papa, pasando por el maíz, hasta la chirimoya. Además, el sistema ecológico del municipio es tan heterogéneo y está tan bien conservado, que dentro de él se encuentra la población más grande de venados cola blanca que aún subsiste en la región.
Chiscas presenta dos cuencas hidrográficas: la del río Arauca y su tributario el río Orozco; y la del río Chicamocha, con sus tributarios los ríos Pajarito y el Chiscano. Toda esta riqueza ambiental ha llevado a sus pobladores y dirigentes a aunar esfuerzos encaminados a la protección y conservación del hábitat. De ahí que se hayan construido escenarios como el Parque Temático de Chiscas, un lugar en pleno corazón del casco urbano, donde el visitante podrá conocer los tres ecosistemas con los que cuenta el municipio: páramo, bosque andino y bosque seco, así como senderos y actividades en pro de conocer y proteger el medio ambiente.
El visitante de Chiscas también podrá recorrer el páramo de Chacarita, el pico de Rechingana, la Sierra de la Nievecita, las lagunas Las Orozcas, ubicadas en el PNN El Cocuy, el Alto de Siachoque, entre otras maravillas naturales. Otra opción es visitar alguna de las fincas ubicadas en las veredas Puente Chiquito, La Fragua, El Limón y Tachirín, y conocer allí el proceso de la molienda de caña de azúcar, mientras se refresca con guarapo o bebe una humeante taza de café. Los chiscanos tienen actividades culturales y religiosas como las fiestas a San Antonio de Chiscas, a los Transportadores y el Aguinaldo Chiscano. Recientemente, el Departamento Nacional de Planeación confirmó que Chiscas es el primer municipio sostenible de Boyacá.