MUNICIPIO DE TINJACÁ
Historia
Tinjacá es siempre destacado como el municipio que tiene el mejor clima de Boyacá. Las condiciones ambientales que ofrece son muy agradables. El poblado, de origen muisca, era llamado Tunjacá por los habitantes, quienes estaban dedicados a elaborar objetos en barro, fique, tagua y atocha, a la llegada de los españoles. La fundación española se produjo en 1556 y fue elevado a parroquia en 1660. En 1847 la Gobernación de la provincia de Tunja dictó el cambio de su antiguo nombre por el de Tinjacá y le agregó los divisos de Tijo y Santa Bárbara.
A Tinjacá se le reconoce también, como a Ráquira, su tradición ancestral en la elaboración de ollas y diversos objetos de barro. Sus artesanías son apreciadas por visitantes nacionales y extranjeros, dada la calidad de los productos al igual que la destreza y creatividad para fabricarlos. Son célebres, además, las miniaturas hechas en marfil vegetal, como se le conoce a la tagua en Europa. El territorio es bañado por el río Tinjacá, el cual lleva sus aguas al río Suárez, en Barbosa (Santander).
Economía
Los habitantes, adicional al trabajo artesanal, también se dedican al cultivo de tomate, durazno, arveja, cebolla cabezona y fríjol; así mismo, a la ganadería (leche) y la extracción de hierro.
Lugares turísticos
Muchos, entre ellos algunos medios de comunicación nacional, califican a Tinjacá como: “uno de los diez lugares para enamorarse de Colombia”. Esto, no solo por su patrimonio histórico y cultural, además de su repunte en el sector turístico, sino porque es uno de los pocos municipios del país fundamentado en una política clara de sostenibilidad y sustentabilidad. A esto se suma la tranquilidad del territorio y la amabilidad de sus pobladores.
Dentro de los lugares turísticos que ofrece la mansión regia de un soberano a sus numerosos visitantes, están el Centro Artesanal de la Tagua, un escenario donde se pueden
ver y adquirir los variados trabajos creados por los artistas de este material, entre los que se destacan juguetes, tableros de ajedrez, figuras decorativas y efigies religiosas; también está el parque principal, rodeado de calles adoquinadas, la parroquia de San Blas, las Piedras de San Pedro y diversas construcciones coloniales adecuadas como estancia para visitantes.
Festividades
Se realizan las ferias y fiestas anualmente en honor al patrono San Blas.